A pesar de contar
con más de cuarenta años a sus espaldas, hay que reconocer que la trayectoria
de Lobezno en La Casa de las Ideas, no es que haya destacado por su uniformidad
y coherencia, habiendo tenido muchos y abruptos saltos. Y es que dependiendo de
la época, el personaje tendía a estar más o menos valorado, dependiendo de por
donde soplara el viento.
Lo cierto es que
las sagas y arcos más importantes del personaje los podríamos contar con los
dedos, de las dos manos eso sí, en cualquier caso, resulta paradójico que en
sus cuarenta años nunca haya tenido una gran trama que catapultara al personaje
más allá del medio que lo vio nacer.
Tal vez sea ante
esta carencia de grandes obras que "El Viejo Logan" se haya
convertido en una de las obras más comentadas y queridas por los lectores, y es
que no es para menos.
Mark Millar
tomaría las riendas de la serie regular de Lobezno en una etapa que marcaría a
fuego a una nueva generación, mientras que tras prolongar su estadía durante un
año, al tiempo el autor regresaría con fuerzas renovadas junto con Steve
McNiven, con el que había hecho buenas migas en "Civil War", para
ejecutar uno de los arcos más portentosos de cuantos ha vivido el personaje en
su larga trayectoria.
El tándem crearía
auténtica magia al presentarnos un relato crepuscular donde en los ocho
episodios que duraría, Logan, nunca sacaría sus garras hasta... ¡SPOILERS!
En tan solo ocho
episodios, Millar y McNiven conseguirían crear una de esas obras que tan en
faltaba le echábamos al bueno de Lobezno, sobre todo, al estar tan bien
ejecutada, permitiría al personaje recrearse en un futuro del Universo Marvel
de lo más desolador, pero que cuando fue publicada nos lo presentaría como el
futuro probable, por lo que el valor añadido de todas las escenas estaba implícito
al poder contener importantes pistas sobre ¿el pasado presente?
A tenor de las
"Secret Wars" y recuperando viejos escenarios en el que seguir sus
líneas maestras argumentales, nos encontramos a Bendis en esta serie donde se
nos presenta, sin duda alguna, como su definitivo canto del cisne con la
Franquicia Mutante. Ya que pese a que se vaya a postergar la conclusión del
'Uncanny X-Men #600' hasta octubre, podríamos considerar ésta serie como el
último adiós del guionista de Cleveland para y con los mutantes, ¿o tal vez se
trata del prólogo de lo que acabará siendo su nuevo trabajo?
No debería
escaparsele a nadie la ironía que sea Bendis el que resucite al Viejo Logan,
teniendo en cuenta que el Lobezno que todos conocemos anda criando malvas, al
menos hasta nuevo aviso, por lo que recuperar a este Logan en las últimas no
sabemos si es intencional o qué, sobre todo, teniendo en cuenta la historia que
nos narra el guionista que recupera todos los elementos del trabajo de Millar,
convirtiéndose en la secuela natural de aquella mítica obra.
Andrea Sorrentino acompaña al guionista en una
trama que le va como un guante. Se aleja por completo de la atmósfera de
McNiven, pero nos transporta a un turbulento ambiente donde todo parece
desembocar a un inexorable final que promete ser épico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario