La etapa de Beyond empieza a dar sus últimos coletazos antes de encaminarse ante su inexorable final. Todo un clásico de Marvel. ¿Para qué negarlo?
Hay que reconocer que el nuevo statuo quo de Ben Reilly como Spider-Man estaba resultando la mar de interesante, un soplo de aire fresco que tal vez necesitaba el bueno del trepamuros tras tantos dramas en el periplo de Nick Spencer.
Wells se las apaña para ofrecernos una presentación de la nueva villana a la altura además de dejar claro que es capaz de tratar a Spider-Man como uno de los mejores.
Tal vez no tenga un potente nombre pero si los editores le dejan hacer y deshacer a su antojo el mito de Spider-Man seguro que nos sorprenderá tal y como está sucediendo con Beyond que ha recuperado el buen sabor de Un Nuevo Día pero sin recurrir a Mefisto.
En unos meses tendremos completa Spider-Man Beyond y comprobaremos la huella que ha dejado esta etapa y si tendrá continuación o no en el futuro de la franquicia de Spider-Man.
Ya sabemos que a Marvel siempre le ha gustado tener una colección de la Araña Escarlata en danza...
Mientras nos toca disfrutar del clásico encontronazo del Duende de turno pero con los suficientes elementos nuevos como para no saber por donde tirarán. Las sorpresas están más que garantizadas.
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